¿Qué ocurre cuando le echamos tierra encima al fuego? Simplemente se ahoga. Esto mismo es lo que sucederá con Leo si en su vida se encuentra con un nativo de Tauro y deciden emprender un camino de amor juntos. Pronto descubrirán que el amor se ha extinguido y solo quedarán las consecuencias de una relación tormentosa.
Aspectos positivos.
Buena vida: a estos dos nativos les gusta compartir una buena y lujosa vida. Esto hará que junten sus esfuerzos y los dirijan a comprar muebles de calidad, vestirse con ropa de marca y permitirse sus salidas de fines de semana a sitios elegantes.
Compatibilidad sexual: los dos son apasionados y Tauro es, además, muy sensual. Las relaciones sexuales serán todo un éxito y cada día se concentrarán en satisfacer más y más a su compañero.
Constancia: el problema que estos representantes del zodiaco tienen con otros signos cuando estos últimos abandonan sus metas a mitad de camino, en este caso no ocurrirá. Ambos son muy determinados y constantes cuando se trata de perseguir una posición laboral, un título universitario o adquirir un bien material costoso.
Aspectos negativos.
Terquedad: nuevamente, los dos cuentan con esta característica, pero en este caso no se trata de algo que lo una, sino de un defecto que puede llegar a abrir una brecha en el vínculo. Cuando ambos se empecinen en que tienen la razón, no habrá forma de hacerlos comprender que están equivocados.
Extravagancia: Tauro es muy tranquilo y discreto, lo que contrasta con la naturaleza extravagante de Leo. Es posible que el toro se sienta avergonzado al salir al lado de alguien tan ostentoso y afectado como el león.
Reserva: en contrapartida a lo anterior, puede ser que Leo sienta que su compañero es demasiado contenido, ya que su forma de ser reservada puede generar cierta desconfianza en alguien que expresa todo lo que siente.
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